No es que nos prefierAn rubias...
¡es que nos prefieren con curvas!

Y fuertes!
Y ojo, no estoy haciendo apología a la obesidad ni al exceso de peso. Justamente me dedico a todo lo contrario, porque entiendo ese desbalance como un daño metabólico que a la larga (y no tan larga) nos va a perjudicar la salud, tanto física como emocional.
Lo que sí abogo es por frenar el continuo daño físico y psicológico que nos hacemos las mujeres, por intentar seguir unos cánones de belleza ridículos, que no se ajustan a la realidad.
Estar continuamente a dieta o hacer dietas hipocalóricas justo antes del verano, para poder lucir ese cuerpo que tampoco nos va a terminar de gustar del todo, lo único que conseguiremos es dañar nuestras hormonas, ralentizar nuestro metabolismo, reducir nuestra temperatura corporal, tener frío constante y quemar menos calorías. Por lo tanto, el efecto contrario.
PARA PERDER PESO HAY QUE COMER. COMIDA REAL Y DENSA EN NUTRIENTES.
PERDER PESO Y NO PERDER LA SALUD EN EL CAMINO REQUIERE TIEMPO.
No hay milagros. Sin prisa pero sin pausa. Y sin olvidar el ejercicio (de fuerza mucho mejor) y el descanso.
las mujeres necesitamos grasa

Dicho lo anterior, las mujeres necesitamos tener grasa en varias zonas del cuerpo. Así lo decidió la madre naturaleza cuando nos otorgó el regalo de poder crear vida y así será por los siglos de los siglos. (amén).
La celulitis que tenemos en nuestros muslos, nuestro abdomen o incluso brazos, es normal. Está en nuestra fisiología y luchar contra ella de una manera obsesiva es ir en contra de nuestro cuerpo. Y nuestras hormonas.
Me refiero en todo momento a una celulitis «saludable». Patologías como el lipedema, la obesidad, la grasa visceral, etc… es otra tipo de grasa. Es un daño hormonal, que aprovecho para decirte que realmente se puede solucionar si regulas tus hormonas, y eso se consigue llevando una alimentación equilibrada. No digo saludable, ya que a fecha de hoy, la salubridad de la pirámide…..es harina de otro costal.
Ejercicios de fuerza, hidratación suficiente, alimentación equilibrada, terapia manual ( maderoterapia, ventosas, drenaje), te ayudarán y mucho a reducir los niveles de grasa corporal y por lo tanto suavizar la celulitis. Erradicarla del todo, será una tarea ardua y si se consigue, ¿a que precio?. ¿Las cremas anticelulíticas? Si Harvard diera masters, tendría uno colgado en mi pared. Y no, no funcionan como nos quieren hacer creer.
cremas milagrooosasss

Recuerdo una vez que me recomendaron una crema. Una marca super conocida. Prometía que en 15 días se daría el milagro en mis carnes. Ahora que pienso, quizás se refería que tenía que ir a Lourdes a por el milagro…andando…no sé…
La cuestión, la crema rezaba que en quince días la celulitis desaparecía. Vale. La crema, un 10% de cafeína, que activaba los adipocitos, bla, bla, bla…Vale. Indicaciones para ponerla: mañana y tarde. Vale. ¿Qué pasó? Que la cafeína de la crema la absorbió mi piel… ¿adivináis quién fue búho toda la noche dando más vueltas que un tiovivo en la cama?. Resultado a los 15 días: Misma celulitis, menos dinero en la cuenta y un día sin dormir. Todo bien.
Moraleja: La cafeína en piel se absorbe como si te hubieras tomado un palet de Monster espresso.
«Si duermes no cafeína». Fdo. Reichel Wonder
incompatibilidades


Y si… lamento decirte (o quizás te lleves una alegría), que la tan ansiada tableta o Six Pack y una salud hormonal óptima, NO SON COMPATIBLES.
Lo podemos debatir tantas veces quieras. Pero la realidad es que no. NO ES SOSTENIBLE EN EL TIEMPO.
Como ya dije antes, la mujer necesita grasa. Habrá quién no lo acepte. Quién me diga que estoy errada. Pero la realidad está ahí fuera. En el 90% de las mujeres y ya desde antes del siglo XVII.
Y si no me crees, fíjate en las 3 gracias de Rubens. Hasta la década de los 70, las mujeres con curvas eran estándar de belleza. Luego se idealizó el cuerpo de la mujer como delgado y sin imperfecciones, y hasta el día de hoy… Delgadas, atléticas, sin celulitis, emprendedoras, trabajadoras, inteligentes, madres del año, amas de casa del año, cocineras del año…arghhh.

Por supuestísimo que está la excepción que confirma la regla, sobretodo en los biotipos Ectomorfos (leer más) que se caracterizan por tener muy poca grasa ( que no celulitis, que también tienen) Me refiero a biotipo orondo. De resto, amigas mías….somos Marylin. Así de guapas y lozanas, con nuestras curvas que hacen derrapar a nuestras parejas. Ellos o ellas.
tuve, tuve, tuve,,,

Y sé de lo que hablo, porque yo he tenido tableta. Yes. Tuve, tuve, tuve…. El típico abdomen cascanueces. Los envidiosos dirán que es un montaje…
Tenía tableta. E iba 24/7 al gimnasio. Tenía tableta. Y tenía frío constante. Tenía tableta. Y desbalance hormonal. Tenía tableta. Y no era más feliz por ello. Y total, ¿para qué? Me duro la tontería dos veranos. Al tercero dije, a freír espárragos la tableta. Quiero ser libre de obsesiones tontas. Y aunque continué dando palos de ciego por un tiempo, porque realmente no conocía el beneficio de las grasas, nunca más volví a caer en algo tan tonto. Si quiero un abdomen que no esté inflamado, ni flácido, por supuesto. Pero lo que realmente quiero es un abdomen sano Y TIEMPO.
Y aHOrA Pregunto: ¿somos mAsocas o qué?

¿Qué nos pasa??
Osea, el mundo entero se postra a los pies de mujeres como: Beyoncé, Jennifer López, Shakira, Rihanna y nosotras seguimos ahí, cuál Paco Martínez Soria en Don erre que erre, amargadas con nuestras curvas? ¿Con nuestra celulitis que nunca desaparecerá del todo y que NO ES UN DEFECTO??
¿Porqué tomamos ejemplos incorrectos de imágenes irreales, photoshopeadas y no el ejemplo de mujeres reales, como las que revolucionaron la Super Bowl el año pasado?
Te dejo el vídeo por si no lo viste. High Level. ( Clicka Ver en YouTube) y flipa.
mujeres del mundo

Seamos egoístas con nuestro bienestar.
Saquemos tiempo para cuidarnos. Para ejercitar nuestros músculos que son el escudo de nuestros huesos. Para alimentar nuestras hormonas con una alimentación consciente, que son el pilar de nuestra salud. Para leer, estudiar o meditar, que son el alimento del alma.
Recordad, todo es información para nuestras células. Y todo cuenta. Cuerpo físico, mental, emocional y espiritual.
«La curiosa paradoja es que cuando me acepto a mí mismo, tal como soy, entonces puedo cambiar». Carl. R. Rogers.