eSTACión Detox
“Ven, mira, escucha, no pierdas el momento.
Sí, escucha el sonido de las hojas en los árboles,
Mira como se tiñen de rojo otoño y amarillo vida.
No pierdas el cálido instante que el frío te ofrece.
Ven, mira, escucha, no digas que no sientes.
Sí, escucha la alegre melodía de las hojas secas en tus pasos.
Y recupera la débil luz esperanza
en los verdes tiernos de abril”
Juan Bote. Poeta
Cada estación tiene sus alimentos. Y no, esto no se debe al azar.
De la misma manera que nuestro cuerpo es sabio, lo es la naturaleza.
En las estaciones donde realizar una detoxificación es lo ideal, la naturaleza nos provee de alimentos destinados a ello, para ayudar a nuestros órganos emuntorios. El otoño es la segunda estación, la primera es la primavera ( que la sangre altera), para estimular las funciones hepatobiliares y realizar una limpieza detox a nivel hepático, renal, pulmonar e intestinal.
Sus colores, su sabores amargos, sus antioxidantes.
La clave es realizar una detoxificación suave para evitar reacciones Herxheimer. Estas reacciones se producen al eliminar las toxinas aposentadas en nuestros tejidos, pasando a la sangre y al exterior.
También es fundamental que sea sostenible. De nada sirve una detoxificación a base de jugos verdes, donde pasemos un hambre atroz, que nos ponga de mal humor, que nos estrese y nos hagan más mal que bien. Hay que disfrutar todos los momentos, incluido este, aunque tenga sabor amargo.
Combinar los alimentos correctamente, bajo supervisión y precaución, ya que ésta dependerá de tu daño metabólico, si es que lo tienes.
Y si no hay daño metabólico, adelante! Llena tu despensa, tu cocina, tus platos y tu organismo de color y sabor!
Muy recomendable apoyar los órganos emuntorios con fitoterapia y suplementación en caso necesario. Tu terapeuta sabrá indicarte los que necesitas. Así como, si tienes oportunidad, masajes de drenaje linfático.
¡Feliz Otoño!
