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Lo que nos pasa, nada tiene que ver con la buena ni con la mala suerte. Que simpleza más estúpida, me vais a perdonar. Y que poco responsable dejar las riendas de tu vida en manos de la suerte…o del culposo. La suerte no existe, señores. Existen las decisiones.
Así como no existen las casualidades. Existen las caUsalidades.
CAUSA-EFECTO. DECISIÓN-CONSECUENCIA. ACCIÓN-REACCIÓN.
¿Coincidencia o incidencia? ¡INCIDENCIA!
Dos personas inciden en un punto del campo cuántico. Dos hechos inciden, así mismo, en un punto del campo cuántico (matrix, universo, llámalo X). Donde al final, siempre volvemos. De una manera u otra. Incidiremos en él.
¿Cuántos Juez Banks conoces? Apuesto a que más de los que te gustaría.
Yo muchos también. Es más, yo misma era «La jueza Banks»… A todas horas. Y con dedo índice incriminatorio, por supuesto.
Tú, tú, tu… mirada inquisitiva, dedo acusador… y tú, tú, tú…
¿Cuándo REALMENTE dejé de juzgar a los demás? Muchos años atrás, cuando fuí consciente, que el juicio que hacía a los demás, era mi propia condenación. Me reprogramé. Y me liberé.
El juicio. La condena. El castigo: Culpable sin amor. ¿Realmente, a quién castiga?.
¿Quién soy yo para juzgar, juzgarte? ¿Quién eres tú para juzgar, juzgarme? Nadie. No tenemos ese poder.
No nos corresponde. Ni siquiera debes juzgarte ni culparte a ti mismo. Debes responsabilizarte. Y aquí volvemos al principio del post. ¿Victima o culpable, amigo? Las víctimas juzgan. Todo el rato a todas horas.
Sabio el Zorro de El Principito.
«Este es mi secreto, es muy sencillo. Sólo se ve bien con el corazón. Lo esencial es invisible a los ojos»
Quizás lo desconozcas, pero el corazón tiene cerebro. Tiene más de 40.000 neuronas…Es el campo electromagnético más fuerte del cuerpo. Ojo….
Si haces las cosas de corazón, no serán un sacrificio. En cambio si las haces como tal, ese será tu amargo resentimiento hasta el fin de tus días.
Toma decisiones sabias. Que tu corazón te guíe a ellas.
Imperdible ver y sentir este documental que habla sobre todo lo anterior.
Una maravilla…
Raquel
Raquel
Me ha encantado ❤️
¡¡Muchísimas gracias!!!!
Totalmente cierto. Soy de los que el 95% de mi día tengo activo mi lado responsable del cerebro. Creo más en la causalidad que en la casualidad. Y desde luego, el corazón tiene cerebro. Me ha encantado el post.